En la materia de Literatura Universal, busco constantemente oportunidades para que nuestro alumnado se involucre con la riqueza y diversidad de culturas a lo largo de la historia.
Este año, con el proyecto «Distintos orígenes, fraternidad universal», mis alumnas comenzaron una emocionante búsqueda cuyo objetivo principal era evidente: descubrir las conexiones compartidas que unen a todas las sociedades y reconocer que, a pesar de nuestras características distintivas, constituimos una identidad humana colectiva.
Para lograrlo, las estudiantes se adentraron en el estudio de culturas como la egipcia, la hindú, la china y la maya. Además de obtener información sobre sociedades antiguas, también perfeccionaron competencias cruciales: investigación, evaluación crítica y expresión ilustrativa. Cada infografía es una pequeña obra de arte que refleja la pasión y el compromiso de sus autoras; sin embargo, esto no sería posible sin su dedicación.
Ha sido gratificante ver cómo nuestras alumnas desenterraban motivos comunes en cuentos, mitos y tradiciones de sociedades aparentemente distantes. Han comprendido que los humanos, a lo largo del tiempo, han perseguido inquietudes existenciales similares, y han comunicado emociones y eventos vitales de manera comparable.
Este proyecto ha mejorado sus conocimientos y fomentado cualidades como la comprensión, la amabilidad y la aceptación. Al reconocer y valorar diversas expresiones culturales, estamos creando ciudadanos cada vez más atentos y comprometidos con un mundo más justo y equitativo.
Este año, nuestro festival navideño gira en torno a esta temática: «La Navidad por el mundo». Además, los estudiantes organizan un Mercadillo Solidario para ayudar a la Comunidad.
Lo importante es sumar, sin importar nuestras diferencias. Lo que nos une, es el espíritu de comunidad, compasión y respeto.
Nuestro alumnado, su dedicación y originalidad nos inspiran constantemente.
¡FELICES FIESTAS!
Sandra García